Saturday, March 2, 2013

Comienzo



En los últimos meses encuentro difícil pensar en comienzos sin pensar en finales.

Cuando un problema acaba, otro empieza. Quizá no para uno mismo, pero para otra persona. Cuando abres las cortinas por la mañana y encuentras el sol, en algunos sitios cae la sombra. Algunos descubren lo que es dar vida el mismo día que otros encuentran la muerte.
Y si ambas cosas ocurren siempre simultáneamente, ¿qué debemos celebrar?

Por un lado, empezamos el día sabiendo que acabará, pasará, y quedará en el olvido. Te planteas empezar una relación con alguien especial por que puede que acabe y, seguramente, por como funciona la sociedad últimamente, va a acabar y vas a querer que acabe hasta que dentro de unos años mires para atrás y pienses por qué lo hiciste tan mal. Y esta pregunta no se queda en tu vida amorosa. 

Llega un día que piensas por qué no empezaste a hacer un trabajo que no te convencía y por qué no lo dejaste antes. Por qué compraste ese sofá si había uno más barato. Cómo se te ocurrió comprarte un coche si querías otro. ¿Deberías haber emigrado a otro país en busca del éxito? Si no hubieses comprado tal cosa, ahora conservarías ese dinero que te hace tanta falta...



Todo ello comenzó y acabo y te cuestionas si fue lo correcto porque se te ha olvidado el motivo por el que lo hiciste o, en 
realidad, es que te acuerdas del motivo y sabes que no era el correcto. Pero lo que sí que se te olvida es que ERA TÚ RAZÓN. La tomaste. Ahora quédatela y no te culpes: si te gustó, bien; si no te gusto, no la vuelvas a tomar. Pero nunca decidas no volver a tomar decisiones. Porque la vida es eso. Son decisiones que tomas y se encuentras con decisiones y eso es lo que te lleva a otras. Imagina que tomas una decisión y acaba donde empieza... ¿Qué sentido tiene? ¿Cómo vas a tomar otra? Casi que tomar una decisión nueva se debe a que la anterior no ocurrió como planeaste, porque si salió bien se habría cerrado el caso y vivirías en un eterno ¿ahora qué?

Y si llegas al ahora qué... ¿has acabado?, ¿es un comienzo? Es lo que tú quieras que sea hasta que la vida te diga que acabaste. Pero no olvides que lo tendrá que decir la vida. La única decisión que no debes tomar es la de acabar porque nunca volverás la cabeza hacia atrás y dirás “uy, esta decisión no fue la acertada”, pero vas a dejar a un gran número de personas repitiéndose esa frase durante esas vidas a las que ellos no van a poner fin.
Recuerda siempre por qué actúas, por qué actuaste. Recuerda que puedes cambiar todo lo que te desagrada menos una cosa. Porque todo es comienzo y final simultáneo pero si acaba tu vida no empiezas tú una de nuevo.Yo aquí dejo constancia de un lugar donde muchos perdieron la vida y a donde otros muchos, actualmente, acuden porque les da la vida.